Presidente Donald Trump, ¿dónde está la prometida pacificación mundial?

Después de su consigna MAGA (Hacer grande a EE.UU. otra vez), la propuesta de “gestionar la paz mundial y terminar inmediatamente con la guerra  Rusia-OTAN-Ucrania” fue la que más simpatía generó en el electorado norteamericano y de mayor aceptación internacional, durante la pasada campaña electoral del presidente Donald Trump.  

En nuestro artículo “Nuevo gobierno de Trump: expectativas impredecibles”, publicado el pasado 19 de enero (un día antes de su juramentación), afirmamos lo siguiente: “Una cosa es llamar al diablo y otra es verlo llegar”.

Al reflexionar sobre esa antigua expresión popular, consideramos que el presidente Trump, no obstante, su estilo y controversiales expresiones, tendrá éxitos en varias de sus propuestas, otras serán resultados mixtos de racionales negociaciones y algunas, simplemente por improcedentes, serán archivadas, con lo cual contribuirá con la pacificación mundial y aportará para “Hacer grande a Estados Unidos otra vez”. Por lo tanto, debemos estar atentos, monitoreando las expectativas impredecibles que se han creado en torno al nuevo gobierno del presidente Trump.”  

Más luego, el 4-5-2025, publicamos el artículo “Después de los 100 días: ¿Quo vadis, presidente Trump?”, del cual reivindicamos el contenido total de los siguientes párrafos:

“Mediante controversiales y unilaterales disposiciones el presidente Trump desató la guerra de los aranceles contra gobiernos “amigos, neutrales y enemigos” y desde su poltrona presidencial expresó: “esta vez gobierno al país y al mundo”.

“El presidente Trump, con su histriónico accionar, olvida estos dos sabios consejos: “quien mucho abarca, poco aprieta” y “quien siembra vientos, cosechará tempestades”, porque, simultáneamente con la generalizada guerra arancelaria, el presidente Trump se abrió varios frentes de guerra con insultos, amenazas y drásticas decisiones que afectan directamente a múltiples sectores internos y externos. Observen este rosario de “golpeados” en estos primeros 100 días:

Amenazas y agresiones a más de 100 países, destacando los feroces ataques contra China, Panamá, Canadá, Groenlandia, México, la Unión Europea y Venezuela; 2) fracaso de su promesa de detener la guerra entre Rusia, la OTAN y Ucrania en «24 horas»; 3) apoyo económico y militar a Israel, incentivando la masacre de niños, mujeres, ancianos y enfermos palestinos —incluidos miembros de Hamás— en la Franja de Gaza; 4) supresión de fondos a varias ONG y a programas sociales, tanto nacionales como internacionales; y 5) cierre de varios departamentos y cancelación de miles de empleos federales.

También, en esos primeros 100 días: 6) desvinculación de importantes organismos apéndices de la ONU; 7) amenazas, enfrentamientos y sanciones contra prestigiosas universidades norteamericanas, incluidas la suspensión de asignaciones financieras; 8) fuertes enfrentamientos con varios medios de comunicación y amenazas contra la libertad de expresión; 9) confrontaciones e insubordinación frente al poder judicial, así como irrespeto a la institucionalidad federal; 10) dramáticos desplomes, en varias ocasiones, de las bolsas de Wall Street, con cuantiosas pérdidas multimillonarias; y 11) ruptura unilateral de varios contratos y convenios con instituciones internacionales y con otros países.

Presidente Donald Trump


Contra la República Dominicana debemos hacer una lectura seria y objetiva de tres preocupantes acciones del presidente Trump durante este período: 1) aumento del 10 % en los aranceles, lo cual representa un duro golpe para nuestra economía; 2) mensaje subliminal que sugiere la apropiación exclusiva de los derechos para el uso y explotación de nuestras «tierras raras»; y 3) una muy extraña indiferencia, ausencia y pasividad ante la grave crisis que atraviesa Haití.

A ese rosario de negativas ejecutorias, ahora el presidente Trump le agrega su apoyo a Israel en la guerra que inició contra Irán y la posibilidad de lanzar bombas nucleares directamente con aviones norteamericanos contra Irán, en “claro respaldo” a la acción guerrerista de Israel.    

Por todo lo anterior, nos preguntamos: – ¿El presidente Trump evaluará las posibles reacciones de China, Rusia y otros países miembros del BRICS+?  

El presidente Trump y su equipo de asesores militares ¿habrán meditado sobre la inmediata reacción de Irán y sus aliados? 

¿Habrán tomado en cuenta el terrible impacto de esta guerra contra Irán en las economías de EE.UU. y el resto del mundo? 

¿Por qué el presidente Trump no toma en cuenta la seria advertencia que hizo el secretario general de la ONU, en la pasada reunión del Consejo de Seguridad?  

El presidente Trump y asesores, ¿estarán conscientes de que, con sus acciones, están empujando a una posible tercera guerra mundial?  

¿Dónde están las gestiones del presidente Trump a favor de la pacificación mundial, prometida, enfáticamente, durante su campaña electoral?

En estas dos semanas que el presidente Trump utilizará para tomar una decisión final, ¡Ojalá pueda utilizar la prudencia político-militar, la racionalidad, su inteligencia emocional, el amor y respeto por la vida humana y el planeta para poner todo su poderío a favor de la pacificación mundial!

De lo contrario, solo nos queda esta imploración: ¡Qué Dios interceda a favor de la humanidad!

Autor

  • Juan Lopez Vision Clave

    Sociólogo, profesor de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y experto en asuntos municipales. Se desempeñó como secretario general del Ayuntamiento de Santo Domingo Este durante más de una década. Articulista y analista con reconocida trayectoria.

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Juan López

Sociólogo, profesor de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y experto en asuntos municipales. Se desempeñó como secretario general del Ayuntamiento de Santo Domingo Este durante más de una década. Articulista y analista con reconocida trayectoria.